Un espacio donde aprender sobre branding y diseño gráfico
El packaging va mucho más allá de diseñar envases para proteger productos. Es la expresión tangible de una marca y está más presente en nuestra vida de lo que pensamos. ¿Cuantas veces has elegido un producto por su envase? Es la magia del packaging.
Hoy en día es imprescindible que cualquier marca o negocio tenga presencia en internet. Sin embargo, crear una página web no es una tarea fácil y el desconocimiento del proceso puede resultar abrumador.
El branding tiene que ver con lo que una marca te hace sentir. Es lo que se ve, y también lo que se escucha y se siente. Es todo lo que está alrededor de una marca y la hace reconocible.
La vida de hoy nos empuja a ir con prisas. Debemos ser cada vez más productivos y hacer más cosas lo antes posible. Pero la mayoría de las veces, ir deprisa no implica caminar más rápido o pensar de forma más ágil.
Ya sea en tu página web, tus redes sociales, o en los soportes impresos, cada fotografía es una oportunidad única para contar la historia de tu marca, transmitir valores y dejar una impresión perdurable en la mente de tu audiencia.
Siempre me ha llamado la atención la gráfica impresa. Guardo las etiquetas y folletos que me parecen especiales por algo: texto en relieve, un papel con una textura especial, una combinación de colores diferente…
©2024 Studio Verso · Maya del Barrio
| Segmento | Detalle | Bono |
| Segmento I | Empresas y autónomos de 10 a menos de 50 empleados | 12.000€ |
| Segmento II | Empresas y autónomos de 3 a menos de 10 empleados | 6.000€ |
| Segmento III | Empresas y autónomos sin empleados o con menos de 3 empleados | 2.000€ |
La solicitud del bono digital se realizará mediante la cumplimentación de un formulario automatizado en la sede electrónica de Red.es, en la convocatoria correspondiente al segmento que se pertenezca, y siempre y cuando se cumplan los requisitos:
– Cumplir los límites financieros que definen las categorías de empresa.
– Estar en situación de alta con una antigüedad mínima de 6 meses.
– No estar considerada una empresa en crisis.
– Estar al corriente de las obligaciones tributarias y seguridad social.
– No superar el límite de ayudas de pequeña cuantía (minimis).
